Núm. 03: PRAGMA (octubre 2023 a marzo 2024)
URBANISMO

Los fuertes de Loreto y Guadalupe memoria de unión poblana

Adriana Soledad Espinosa Flores
Universidad Autónoma del Estado de México
Biografía
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Publicado 2023-10-05

Palabras clave

  • memoria colectiva,
  • símbolos urbanos,
  • identidad

Cómo citar

Espinosa Flores, A. S. (2023). Los fuertes de Loreto y Guadalupe memoria de unión poblana. Revista Pragma, 2(03), 29–39. Recuperado a partir de https://pragma.buap.mx/index.php/revistafabuap/article/view/31

Resumen

Con el presente trabajo se pretende mostrar cómo a partir del rescate de un monumento histórico se puede construir un espacio de unión y orgullo nacional que mantiene la esencia de libertad. Este documento se basó en el estudio de un fenómeno desde una perspectiva cualitativa compatible con los fundamentos teóricos que sustentan el marco comprensivo y descriptivo de nuestro trabajo. Parte de una revisión documental de la zona histórica de los Fuertes de Loreto y Guadalupe, en la ciudad de Puebla, en México, y se nutre de visitas de campo a la zona de estudio a partir de la intervención arquitectónica del sitio en el 2012 a la fecha para observar cómo se fue dando la aceptación de la modificación del espacio, la apropiación de éste por los habitantes y la generación de un sentido de identidad a partir de la memoria colectiva, por un símbolo urbano renovado. Hace 155 años se llevó a cabo la batalla del “5 de mayo” donde las fuerzas militares mexicanas defendieron el territorio nacional contra los franceses; en ese entonces el más poderoso del mundo, y a pesar de ello la valentía de los mexicanos y una buena estrategia hicieron que se ganara esta defensa en los fuertes de Loreto y Guadalupe ubicados muy cerca de la ciudad de Puebla, México. Este triunfo dejó marca en la memoria de los mexicanos, tanto los que habitan en este territorio, como aquellos paisanos que emigraron a Estados Unidos, y que ahora es la celebración más importante de los mexicoamericanos en tierra extranjera. Durante décadas esta zona histórica se preservó tan sólo como un monumento, pero a partir del 2012 se tomó conciencia de la importancia de la memoria histórica, y se generó un gran esfuerzo para devolverle la importancia a este espacio que aglutinara el sentir y saber de una colectividad. Manifestar el orgullo de nuestro nacionalismo en un espacio digno, tanto por lo que representa, como por el rescate de un sentimiento de unión y fraternidad entre mexicanos que va más allá de las fronteras.